El año pasado, las ventas de motos superaron en 10% a las de vehículos livianos (autos y camionetas). La explicación se puede encontrar en sus atributos. Por ejemplo, sus dimensiones hacen que sean más fáciles de estacionar y guardar, y tienen un consumo menor de gasolina, ofreciéndonos un mayor recorrido.
Las motocicletas, al igual que los autos, necesitan algunos cuidados, en especial si han permanecido en casa durante estos días de cuarentena obligatoria y ya se planea utilizarlas debido a la reactivación de actividades económicas.
Así que, si te movilizas en moto para ir a tu trabajo, para llevar pedidos o simplemente para pasear, te damos algunos consejos para cuidarla mejor:
- Batería. Se debe encender el motor de dos a tres veces por semana durante cinco a 15 minutos para mantener la batería de la moto cargada. No olvides encenderla en un espacio ventilado para que los gases se disipen rápidamente.
- Tanque de gasolina. Los tanques suelen fabricarse con material hermético para mantener aislado el combustible. Un combustible de buena calidad protege el motor contra la humedad, la corrosión y la suciedad. Verifica que haya al menos un galón de combustible en el tanque para que otras partes no se dañen.
- Fuerza líquida. El líquido refrigerante de la moto debe situarse entre el nivel mínimo y máximo para evitar que se recaliente el motor. El aceite, de otro lado, siempre debe mantenerse en el nivel máximo.
- Bajo presión. Las llantas también necesitan cuidado. Si notas pérdida de presión al tocarlas con la mano, es preciso ir a un grifo para que las revisen. La vida útil de las llantas dependerá de tengan el nivel correcto de presión. Si ves grietas o rasgaduras, ya es momento de cambiarlas.
- Cadena lubricada. Limpia la cadena de la moto con un spray o usa un líquido especial para remover la suciedad. Luego, engrásala con un lubricante o con aceite para motores. Debes mantenerla lubricada para reducir el efecto de la humedad.
- Limpieza y desinfección. Limpia tu moto con agua y jabón, o usando un trapo húmedo. Luego, puedes pasarle un trapo con alcohol isopropílico, en especial, en las zonas más expuestas al contacto, como manijas, luces, espejos y asientos. No olvides cubrirla con una lona para evitar la suciedad (polvo) y la corrosión.
Antes de salir, no olvides revisar de nuevo los niveles de aceite y combustible, los espejos, la presión de las llantas y el correcto funcionamiento de las luces. Asimismo, recuerda seguir protegiéndote con el uso de tu casco, mascarilla y lavado de manos. Además, no olvides contar con un SOAT para motos vigente que te protegerá ante cualquier accidente.
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