Adquirir el auto de nuestros sueños nos demanda un gran sacrificio, por eso debemos prestar especial atención a su cuidado. La lista de beneficios de tenerlo en óptimas condiciones es larga, pues no solo te permitirá manejar de forma segura por la ciudad, sino que, además, alargará su vida útil, en caso decidas venderlo. Por el contrario, si no le brindas el mantenimiento que necesita, corres muchos riesgos. En esta nota te contamos cuáles son:
Mayor consumo de combustible. No cambiar a tiempo el aceite y los filtros de aire del motor aumenta la presión sobre este, lo cual incrementa el consumo de combustible. ¡El gasto extra en combustible puede ser mucho mayor que la inversión de llevar tu auto al mantenimiento!
Reparaciones costosas. Ante la falta de un mantenimiento preventivo regular, pueden generarse fallas en el sistema de transmisión, el motor, entre otros. Reparar estos desperfectos suele ser mucho más costoso que llevarlo al taller a tiempo.
Imprevistos. Una de las situaciones más incómodas que puede afrontar un conductor es quedarse varado a mitad de camino por una avería en el motor o una llanta pinchada. En cambio, los riesgos de que esto suceda se reducen drásticamente si tu auto recibe mantenimiento y las piezas desgastadas son reemplazadas periódicamente por otras más nuevas.
Pérdida de valor. Si en un momento deseas vender tu auto, la falta de un mantenimiento adecuado y constante se reflejará en su estado, y esto podría reducir considerablemente su precio de venta.
Ahora ya sabes que brindar a tu auto el mantenimiento que necesita no es un gasto, sino una forma de cuidar tu inversión, que te ayudará a evitar preocupaciones y dolores de cabeza en el futuro. ¡Prioriza siempre tu bienestar!
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