Cada vez son más las razones para hacer de la bicicleta nuestro medio de transporte favorito. Y es que pedalear nos permite ejercitarnos, cuidar el medioambiente y evitar el riesgo de contagiarnos de la COVID-19 en los buses públicos. Si quieres comprarte una por primera vez y no sabes qué aspectos tener en cuenta, no te preocupes, en esta nota encontrarás algunos consejos que te ayudarán a elegir la opción ideal para ti. Lee con atención.
El tipo adecuado. ¿Para qué la usarás y en qué lugares? Eso es lo primero que debes preguntarte, pues de ello dependerán tus decisiones. No tendrás las mismas necesidades si la usas para subir o bajar montañas, que si planeas trasladarte con ella todos los días al trabajo o a la universidad. Por eso, existen de varios tipos: montañera, de ruta, híbrida, urbana, etc.
Una inversión provechosa. El monto que estés dispuesto a invertir debería guardar relación con el uso que le darás a la bicicleta. Por ejemplo, si se convertirá en tu principal medio de transporte, te conviene invertir en una de gama media, pues así contarás con un vehículo lo suficientemente confiable. En cambio, si piensas usarla solo en tus ratos libres, puedes optar por una más económica.
La talla justa. Con las bicicletas sucede algo parecido que con las prendas de vestir: ¡solo si te la pruebas, sabrás si es adecuada para ti! Elegir una talla adecuada te evitará dolores de espalda, brazos, y te facilitará el pedaleo. La talla depende en parte de tu estatura, pero no solo de eso, sino también del largo de piernas, brazos, la entrepierna, etc. No caigas en el error de creer que puedes acomodarte a una bicicleta que no es de tu talla con solo subir el asiento, ¡podrías salir lastimado!
Un marco conveniente. Si vas a usar la bicicleta para trasladarte a diario de un punto a otro de la ciudad, basta con un marco de acero o de aluminio, que son los más comunes y accesibles. El acero es más pesado pero fácil de soldar, mientras que el aluminio es liviano pero más complicado de reparar. Si te encuentras en la capacidad de invertir un monto mayor, cuentas con la opción de los marcos de fibra de carbono o titanio, que son bastante livianos y veloces.
¿Con o sin cambios? No necesitarás comprarte una bicicleta con muchos cambios, si solo vas a utilizarla para pedalear por la ciudad. Pero si vas a recorrer seguido zonas empinadas, necesitarás de los cambios, pues de lo contrario tendrás muchos malestares.
Imprescindibles frenos. Los más fáciles de usar y los más baratos son los tradicionales frenos V-brake. Con ellos tendrás suficiente si vas a trasladarte por zonas pavimentadas, que no representan un mayor desafío. Sin embargo, si lo que buscas es más adrenalina, los frenos de disco son excelentes para transportarte a mayor velocidad, además de funcionar mejor bajo la lluvia o sobre el lodo.
Seguridad ante todo. Recuerda que son imprescindibles las luces delantera y trasera, así como los reflectores en las ruedas. Te permitirán mantenerte visible y evitar los accidentes.
Como puedes ver, es clave tener muy claras tus necesidades para aprovechar al máximo tu inversión. De esta manera, muy pronto podrás disfrutar de forma plena junto a tu nueva compañera de aventuras.
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