¿Qué pasaría si ese evento, ese que erróneamente dices que pasa uno en un millón, sucediera y quedaras invalido e incapacitado para laborar? Ese tipo de situaciones inesperadas y catastróficas no están alejadas de la realidad. Ante estas situaciones, las personas que dependen de ti, como tus hijos pequeños o padres mayores, se encontrarían tan vulnerables como tú. El resto de tu familia cercana o amigos, por más aprecio y estimación que puedan tenerte, posiblemente no estén en capacidad de enfrentar todos los gastos asociados a este problema.
Es así como los seguros de invalidez, que normalmente incluyen sobrevivencia y sepelio para tener cubiertas todas las posibilidades, se convierten en tu mejor aliado para evitar ese evento inesperado. Con este seguro no dejarás una carga a nadie y, de ocurrirte algo, tus familiares podrán cubrir tus gastos. Ten en cuenta que hay quienes cuentan con un seguro de invalidez por estar afiliado a un sistema de pensiones (SPP u ONP). Sin embargo, si no estás afiliado a ninguno, mejor acércate a una aseguradora y pregunta por este seguro. Hoy en día, el mercado te ofrece una amplia gama de productos personalizados para amortizar estos gastos imprevistos.
